Con todas las dificultades de tu día a día, tu mente va a cien. Te encuentras en un estado de incertidumbre y confusión. Hace tiempo que planeas sacar algún espacio para ti, para cultivar tu mente y tu creatividad, pero parece que nunca llega el momento de probar, porque las obligaciones y los problemas te comen. La posibilidad de combinar la escritura y la meditación te motiva, y te gustaría apuntarte a un curso, pero ¿cuándo? No puedes comprometerte a asistir a clases regulares, y pensar en hacerlo te estresa más todavía.
¿Quieres salir de este círculo vicioso que te desvitaliza?
Si pretendes cambiar tu rutina de golpe, eso puede o paralizarte o lanzarte al área del pánico y, posteriormente, al extremo del desánimo. ¿Te suena? Es mejor ir subiendo un escalón cada vez. El tiempo (o la falta de él) tiene que ver con las prioridades que nos ponemos y con las cosas a las que damos importancia. Abrir una brecha, aunque sea muy pequeña, puede ser esencial a la hora de que cambie tu visión del mundo y tu mente se haga más espaciosa y creativa. Entonces será el momento de dar otros pasos, pero no antes.
Si pretendes cambiar tu rutina de golpe, eso puede o paralizarte o lanzarte al área del pánico y, posteriormente, al extremo del desánimo. ¿Te suena? Es mejor ir subiendo un escalón cada vez. El tiempo (o la falta de él) tiene que ver con las prioridades que nos ponemos y con las cosas a las que damos importancia. Abrir una brecha, aunque sea muy pequeña, puede ser esencial a la hora de que cambie tu visión del mundo y tu mente se haga más espaciosa y creativa. Entonces será el momento de dar otros pasos, pero no antes
Sin un método es muy difícil enfrentarse al juego de espejos de la mente. Un día piensas una cosa y otro día otra. Un camino trazado te marca el recorrido de aquello que ya sabes que es bueno para ti.
A veces sabemos lo que queremos, pero necesitamos que alguien —que ha pasado ya por esa fase— nos dé un empujón en la dirección correcta, para recuperar la conexión con nuestro corazón y con nuestras propias necesidades.
Ejercitarte en la escritura y la meditación es la forma de que estas disciplinas queden incorporadas a tu vida como una rutina que te hará crecer sin cesar y que irá sustituyendo a los patrones confusos.
A lo largo de 6 lecciones accederás a un método que te permitirá abrir un hueco para la escritura y la meditación, que a su vez aportarán calma y lucidez a tu vida.
1. Cómo conectar la escritura y la meditación
2. El cultivo de la atención.
3. Abrir el corazón
4. Convertir la adversidad en camino
5. Yo y los otros
6. Tu mundo emocional.
Soy Isa Cañelles y de pequeña fui muy infeliz. Me he tirado toda la vida buscando respuestas al porqué de tanto sufrimiento, y por el camino me encontré con la lectura, con la escritura, con la terapia y con la meditación.
O, más bien, me topé con muy buenos/as escritores/as, profesores/as de creación literaria, terapeutas y con una maestra de meditación a la que seguir de por vida. Ellos y ellas me enseñaron a verme de otra manera. Cuando creía que todo estaba perdido, que había algo erróneo e inadmisible en mi persona, aparecían esos espejos cuyo reflejo mostraba a alguien digno de cariño. El agradecimiento hacia ellos y ser consciente de lo duro y costoso de algunos procesos de sanación es lo que me ha llevado a impartir este curso, para mostrar a otros lo que a mí tan generosamente me han mostrado.
A lo largo de este camino he ido tirando miguitas de pan, como Pulgarcito, que te sirvan para recorrer el tuyo. Nadie puede hacerlo por ti, pero sé por experiencia que se puede propiciar que encuentres la llave de la celda allí donde nunca antes se te había ocurrido mirar. Ser esa linterna es lo que más me puede gratificar.
Aparte de mis muchos años de experiencia como profesora de creación literaria y meditadora, y de haber realizado una formación en psicología contemplativa, he invertido mucho trabajo y esfuerzo en relacionar estas disciplinas para que la gente que sienta cierta inclinación hacia las palabras escritas y hacia el autodescubrimiento pueda beneficiarse doblemente.
Soy Isa Cañelles y de pequeña fui muy infeliz. Me he tirado toda la vida buscando respuestas al porqué de tanto sufrimiento, y por el camino me encontré con la lectura, con la escritura, con la terapia y con la meditación.
O, más bien, me topé con muy buenos/as escritores/as, profesores/as de creación literaria, terapeutas y con una maestra de meditación a la que seguir de por vida. Ellos y ellas me enseñaron a verme de otra manera. Cuando creía que todo estaba perdido, que había algo erróneo e inadmisible en mi persona, aparecían esos espejos cuyo reflejo mostraba a alguien digno de cariño. El agradecimiento hacia ellos y ser consciente de lo duro y costoso de algunos procesos de sanación es lo que me ha llevado a impartir este curso, para mostrar a otros lo que a mí tan generosamente me han mostrado.
A lo largo de este camino he ido tirando miguitas de pan, como Pulgarcito, que te sirvan para recorrer el tuyo. Nadie puede hacerlo por ti, pero sé por experiencia que se puede propiciar que encuentres la llave de la celda allí donde nunca antes se te había ocurrido mirar. Ser esa linterna es lo que más me puede gratificar.
Aparte de mis muchos años de experiencia como profesora de creación literaria y meditadora, y de haber realizado una formación en psicología contemplativa, he invertido mucho trabajo y esfuerzo en relacionar estas disciplinas para que la gente que sienta cierta inclinación hacia las palabras escritas y hacia el autodescubrimiento pueda beneficiarse doblemente.
¡Hazle caso a tu corazón! No te arrepentirás…