Vas peregrinando de taller en taller, de un profesor a otro, y todos son maravillosos, pero tú no acabas de sentirte a gusto con lo que escribes. Sientes que ya sabes todo lo que hay que saber sobre narradores omniscientes y protagonistas, sobre conflictos y cambios… pero siempre hay una pieza importante que se descuadra en tus historias. Te aburres de ellas. O ellas se aburren de ti.
Dejar de escribir no es una opción, pero hacerlo se ha convertido en un círculo vicioso de desánimo. Robas tiempo a los niños, al trabajo o a tu pareja para poder escribir unas líneas o unas páginas a la semana, ¿y para qué? ¿Tiene sentido hacer este esfuerzo si estás tan lejos de escribir como los «grandes»?
¿Tus historias no acaban de tener un sentido profundo o no sabes cómo reflejarlo? ¿Te miras demasiado el ombligo y no conectas realmente con los lectores en un acto de transmisión? ¿Dónde se quedaron los relatos inspirados del pasado? ¿Cómo deshacerte de toda esa técnica que —como un corsé demasiado apretado— no deja respirar a tus personajes? ¿Echas de menos la inspiración? ¿Te sientes atrapado en un callejón sin salida?
Reconócelo, a lo mejor estás demasiado metido en tus problemas y te falta justo lo más importante para escribir de verdad: relajarte, dejarte traspasar por la realidad y devolvérsela al lector —filtrada por tu forma particular de ver el mundo—en un acto puro de generosidad.
Cuando comenzaste a escribir tenías más apertura pero te faltaba técnica. Ahora has aprendido la teoría pero te falta fluidez.
El problema no tiene que ver con tus capacidades, sino con tus pensamientos
Llevas demasiado tiempo controlando y esforzándote, así que es el momento de que te relajes y tomes contacto con tu cuerpo, tu corazón y tu mente. En ellos está la verdadera historia que quieres contar. En cuanto abras la válvula, brotarán de ti situaciones que nunca antes habrías pensado que pudieran salir. La escritura es gozo y libertad. Para escaparte de los mismos mecanismos mentales de siempre has de pillar a tu mente in fraganti a través de la creatividad.
Desaparece del mapa: tu historia no te necesita, no precisa un aburrido notario que tome acta de lo que hacen o dejan de hacer los personajes. Tú eres tus personajes, así que déjalos en paz y no los trates como marionetas. Has de estar al servicio de la historia, y no al revés. Permanece en continuo contacto con la vivencia emocional, y usa las herramientas que tengas a tu disposición para trasladársela al lector.
Las historias no suelen salir a la primera. Escribir es generar borrador tras borrador. La revisión es parte del proceso creativo, y no un tedioso trámite racional por el que hay que pasar para que te pongan un sello de «finalizado». Si no aprendes a revisar desde la inmersión te quedarás siempre en el terreno del aprendiz y no adquirirás maestría. Has de meterte en el pellejo del lector y revisar desde ahí.
1. A por una voz propia
2. El narrador y su discurso
3. Qué contar
4. Cómo contar
5. Escribir con los ojos
6. El relato como sistema solar
7. Encarnarse en el personaje
8. Tipos de personajes
9. El tiempo de tu historia
10. Atmósfera y extrañamiento
11. Viaje a través del mundo emocional
12. Lo que se dice y lo que no se dice
Soy Isa Cañelles y de pequeña casi no hablaba, así que me refugié en la lectura y en la escritura. Sin ellas, habría sucumbido a la desesperación, así que les he sido fiel el resto de mi vida y aquí me tienes.
El talento es una patraña
Luego realicé la carrera de Filología Hispánica, y a los veinte años empecé a impartir clases de creación literaria. Por ellas han pasado multitud de personas de todo tipo, muchas de las cuales ahora están en las librerías de todo el país. Y he comprobado que eso del «talento» es una patraña, o digamos que solo se trata de cierta facilidad innata para el desarrollo de cierta disciplina artística, pero que lo esencial tiene que ver con otras cualidades de la persona que se pueden trabajar: la perseverancia, la capacidad de escucha, la confianza, la apertura de corazón, la flexibilidad, el sentido del humor… Con todo eso me gusta trabajar en clase, combinando la «técnica» con la actitud de la «persona».
Con todo eso me gusta trabajar en clase, combinando la «técnica» con la actitud de la «persona»
El curso de los marines
Al curso de escritura consciente me gusta llamarlo el de «los marines», porque es un entrenamiento intensivo con los patrones mentales de cada uno, con todo aquello que está impidiendo que te abras y sirvas como canal. Se trabaja no solo con la fase de la escritura sino con la fase de la revisión, y se analizan textos consagrados para entender que ser «grande» o «pequeño» es una cuestión de actitud, y que tú también puedes aspirar a ello. Es más, que cultivar una auténtica aspiración te acercará al resultado.
Te enseño a vivir escribiendo
Aparte de mis muchos años de experiencia como profesora de creación literaria, también llevo mucho meditando, he realizado una formación en psicología contemplativa, y he invertido un ingente trabajo y esfuerzo en relacionar estas disciplinas. Esto hace que mis cursos sean diferentes: no te enseño exactamente a escribir bien, sino a vivir de una forma más consciente y amorosa a través de la escritura.
Soy Isa Cañelles y de pequeña casi no hablaba, así que me refugié en la lectura y en la escritura. Sin ellas, habría sucumbido a la desesperación, así que les he sido fiel el resto de mi vida y aquí me tienes.
El talento es una patraña
Luego realicé la carrera de Filología Hispánica, y a los veinte años empecé a impartir clases de creación literaria. Por ellas han pasado multitud de personas de todo tipo, muchas de las cuales ahora están en las librerías de todo el país. Y he comprobado que eso del «talento» es una patraña, o digamos que solo se trata de cierta facilidad innata para el desarrollo de cierta disciplina artística, pero que lo esencial tiene que ver con otras cualidades de la persona que se pueden trabajar: la perseverancia, la capacidad de escucha, la confianza, la apertura de corazón, la flexibilidad, el sentido del humor… Con todo eso me gusta trabajar en clase, combinando la «técnica» con la actitud de la «persona».
Con todo eso me gusta trabajar en clase, combinando la «técnica» con la actitud de la «persona»
El curso de los marines
Al curso de escritura consciente me gusta llamarlo el de «los marines», porque es un entrenamiento intensivo con los patrones mentales de cada uno, con todo aquello que está impidiendo que te abras y sirvas como canal. Se trabaja no solo con la fase de la escritura sino con la fase de la revisión, y se analizan textos consagrados para entender que ser «grande» o «pequeño» es una cuestión de actitud, y que tú también puedes aspirar a ello. Es más, que cultivar una auténtica aspiración te acercará al resultado.
Te enseño a vivir escribiendo
Aparte de mis muchos años de experiencia como profesora de creación literaria, también llevo mucho meditando, he realizado una formación en psicología contemplativa, y he invertido un ingente trabajo y esfuerzo en relacionar estas disciplinas. Esto hace que mis cursos sean diferentes: no te enseño exactamente a escribir bien, sino a vivir de una forma más consciente y amorosa a través de la escritura.
«El curso de Escritura Consciente ha sido una experiencia increíble para mí. He aprendido teoría literaria y a tener una rutina de escritura, cosa que me era muy difícil hasta ahora. Más importante aún ha sido conocer al grupo de mujeres, que ya considero compañeras de camino y fatigas, y a Isabel; sus comentarios y saber hacer han conseguido calar en mí de forma muy positiva, guiándome hacia un diamante que me era esquivo: el de disfrutar escribiendo y compartiendo errores y aciertos. Ahora no puedo ni quiero dejar de hacerlo. Gracias por este regalo».
«Yo escribía muy poco antes de conocer a Isa. Escribía solo para mí, cosas que me ocurrían, que me gustaban o que me preocupaban, pero jamás volvía a leer lo escrito. Hace dos años que escribo con Isa. Me he acostumbrado a tener en mi pensamiento una de sus propuestas de escritura. He sido feliz cuando levantaba la tapa del portátil y mi corazón latía junto a mis personajes en ambientes o lugares visitados o creados para la ocasión. Cuando bajo la pantalla del ordenador me queda en el cuerpo una sensación parecida a la que siento cuando abro los ojos tras una meditación. La sensación mientras escribo es tan extraordinariamente especial que no sé escribir lo suficientemente bien para poderla explicar. Por eso, si Isa me lo permite, seguiré un tercer curso escribiendo y meditando con ella y mis compañeras».
«A medida que hacía esfuerzos por encontrar fórmulas narrativas también descubrí otras maneras o fórmulas para narrar mi propia vida. Me sentí en control y a la vez más libre».
«El curso de Escritura Consciente ha sido una experiencia increíble para mí. He aprendido teoría literaria y a tener una rutina de escritura, cosa que me era muy difícil hasta ahora. Más importante aún ha sido conocer al grupo de mujeres, que ya considero compañeras de camino y fatigas, y a Isabel; sus comentarios y saber hacer han conseguido calar en mí de forma muy positiva, guiándome hacia un diamante que me era esquivo: el de disfrutar escribiendo y compartiendo errores y aciertos. Ahora no puedo ni quiero dejar de hacerlo. Gracias por este regalo».
«Yo escribía muy poco antes de conocer a Isa. Escribía solo para mí, cosas que me ocurrían, que me gustaban o que me preocupaban, pero jamás volvía a leer lo escrito. Hace dos años que escribo con Isa. Me he acostumbrado a tener en mi pensamiento una de sus propuestas de escritura. He sido feliz cuando levantaba la tapa del portátil y mi corazón latía junto a mis personajes en ambientes o lugares visitados o creados para la ocasión. Cuando bajo la pantalla del ordenador me queda en el cuerpo una sensación parecida a la que siento cuando abro los ojos tras una meditación. La sensación mientras escribo es tan extraordinariamente especial que no sé escribir lo suficientemente bien para poderla explicar. Por eso, si Isa me lo permite, seguiré un tercer curso escribiendo y meditando con ella y mis compañeras».
«A medida que hacía esfuerzos por encontrar fórmulas narrativas también descubrí otras maneras o fórmulas para narrar mi propia vida. Me sentí en control y a la vez más libre».
Programa semestral de septiembre de 2023 a marzo de 2024, con vídeos, materiales, propuestas y comentarios de los textos semanales a través de una escuela virtual, con 12 sesiones por zoom en directo de 2 horas, en un grupo reducido de no más de 10 personas.
al mes, en 6 cuotas
«Escritura Consciente ha sido un proceso muy intenso para mí. Lo definiría como una carrera de resistencia que me ha señalado el camino para conectar conmigo misma y confrontarme con luces y oscuridades que se despliegan en los personajes y sus vicisitudes, además de contar con el apoyo y la visión de Isa y de las compañeras del curso».
«Con Isa he descubierto que solo sacando a la luz nuestros conflictos, haciéndoles frente hasta resolverlos, evolucionamos como personas; lo contrario es quedarte estancada en un lago de tranquilidad, que tarde o temprano comienza a oler a podrido».
«Llevo dos años disfrutando de los acompañamientos de Isa. Son intensos, pero merece la pena la experiencia. Estos dos años han cambiado mi forma de mirarme hacia dentro y sacar hacia fuera todo lo mejor de mí, de mis recuerdos, de mis experiencias, de mi vida, y hacerlo a través de la palabra escrita ha sido mágico. Estos acompañamientos han sido un regalo que la vida me ha ofrecido a través de Isa».
«Escritura Consciente ha sido un proceso muy intenso para mí. Lo definiría como una carrera de resistencia que me ha señalado el camino para conectar conmigo misma y confrontarme con luces y oscuridades que se despliegan en los personajes y sus vicisitudes, además de contar con el apoyo y la visión de Isa y de las compañeras del curso».
«Con Isa he descubierto que solo sacando a la luz nuestros conflictos, haciéndoles frente hasta resolverlos, evolucionamos como personas; lo contrario es quedarte estancada en un lago de tranquilidad, que tarde o temprano comienza a oler a podrido».
«Llevo dos años disfrutando de los acompañamientos de Isa. Son intensos, pero merece la pena la experiencia. Estos dos años han cambiado mi forma de mirarme hacia dentro y sacar hacia fuera todo lo mejor de mí, de mis recuerdos, de mis experiencias, de mi vida, y hacerlo a través de la palabra escrita ha sido mágico. Estos acompañamientos han sido un regalo que la vida me ha ofrecido a través de Isa».
Sí. Has de tener experiencia en talleres literarios o varios años escribiendo por tu cuenta.
El curso te llevará un mínimo de tres horas semanales. Si es más, mejor. Es un curso en el que conviene sumergirse al máximo, porque así lo aprovecharás bien. No obstante, es imposible estar a cien todo el tiempo. Puedes ajustar el tiempo que le dediques a tus posibilidades, siempre que cumplas con los mínimos.
¿Cuánto te gastas cada vez que vas al cine o te vas a comprar ropa? Piensa que muchas veces los gastos tienen que ver con las prioridades. Con este curso estás invirtiendo en TI, y en una mejor relación con todo lo demás, lo que te generará mucha más rentabilidad que cualquiera de las compras superfluas que puedas realizar a lo largo del año. Y si realmente estás muy apurado/a de dinero, te recomiendo que empieces a ahorrar para la próxima convocatoria. También te recomiendo que te leas este artículo de mi blog.
Es importante asistir a todas las sesiones, pero si por razones de causa mayor no puedes dejar de faltar a una sesión, recibirás la grabación de esta y los materiales correspondientes. Y si tuvieses que abandonar el curso por algo ineludible, no se te devolverá el importe, pero se acumulará (durante un año) para que te puedas apuntar en la siguiente edición.
Si no quieres comprometerte este curso no es para ti. Yo aporto todo mi conocimiento, mi implicación y mi compromiso, así que necesito el tuyo para poder garantizarte unos buenos resultados.
Si te surge un imponderable y no puedes asistir al curso, si me avisas con más de 20 días antes del comienzo de este, te devolveré el importe restando los gastos bancarios y administrativos. Si me avisas después, no se te devolverá el importe, pero podrás usarlo para la siguiente convocatoria o para otros cursos míos en el plazo de un año.
«Comencé el curso bajo la premisa de aprender a «escribir bien», y poco a poco fui soltando esa «pretensión» para «dejarme verter» sobre el papel. Aún me queda mucho camino por recorrer, pero este año he vivido un proceso personal en el que la escritura se ha extendido a todos los planos de mi vida, tomando conciencia de mi mirada y mi posicionamiento ante las cosas. Ha sido un recorrido muy intenso, una montaña rusa de emociones y, por supuesto, lo más importante, he logrado desprenderme de muchos prejuicios y muchos miedos para poder compartir cachitos de mi corazón».
«Ha sido un curso que me ha ayudado a tomar tierra, y a ser más proactiva. Menos reactiva. En tiempos de pandemia, de aislamiento, de incertidumbre, he encontrado en la escritura y meditación a una amiga para siempre. La fuerza del grupo ha sido un reto cada semana. Los deberes, un soplo de aire fresco para la imaginación. Isa te enseña la herramienta, y el arte, lo encuentras tú. O mejor dicho él te encuentra a ti. ¡Una gozada!».
«El acompañamiento de Escritura Consciente me ha ayudado a superar el miedo a mostrarme, el miedo a compartir, a expresarme… Siento que, sin darme cuenta, he crecido, me he permitido relajarme y dejar espacio para mi yo más «invisible». Isa es como una brujita que va encendiendo velas en el sendero de sus alumnos, y deja por ahí vocecitas que resuenan en el fondo de la cabeza y en lo hondo del corazón en los momentos precisos, increíble. Gracias, siempre gracias».
«Comencé el curso bajo la premisa de aprender a «escribir bien», y poco a poco fui soltando esa «pretensión» para «dejarme verter» sobre el papel. Aún me queda mucho camino por recorrer, pero este año he vivido un proceso personal en el que la escritura se ha extendido a todos los planos de mi vida, tomando conciencia de mi mirada y mi posicionamiento ante las cosas. Ha sido un recorrido muy intenso, una montaña rusa de emociones y, por supuesto, lo más importante, he logrado desprenderme de muchos prejuicios y muchos miedos para poder compartir cachitos de mi corazón».
«Ha sido un curso que me ha ayudado a tomar tierra, y a ser más proactiva. Menos reactiva. En tiempos de pandemia, de aislamiento, de incertidumbre, he encontrado en la escritura y meditación a una amiga para siempre. La fuerza del grupo ha sido un reto cada semana. Los deberes, un soplo de aire fresco para la imaginación. Isa te enseña la herramienta, y el arte, lo encuentras tú. O mejor dicho él te encuentra a ti. ¡Una gozada!».
«El acompañamiento de Escritura Consciente me ha ayudado a superar el miedo a mostrarme, el miedo a compartir, a expresarme… Siento que, sin darme cuenta, he crecido, me he permitido relajarme y dejar espacio para mi yo más «invisible». Isa es como una brujita que va encendiendo velas en el sendero de sus alumnos, y deja por ahí vocecitas que resuenan en el fondo de la cabeza y en lo hondo del corazón en los momentos precisos, increíble. Gracias, siempre gracias».