La dicotomía que apunta al conflicto
Toda temática narrativa ha de conllevar cierta contradicción, cierta fisura que es, justo, en la que hurga el autor. No interesan la felicidad, la perfección y la plenitud, entre otras cosas porque no existen en el ser humano o, más bien, solo se las puede rozar con la punta de los dedos trascendiendo la infelicidad, la imperfección y la carencia.
Solo hay evolución o crecimiento vitales a través de la superación de un bloqueo
En esta dicotomía es en la que indaga cualquier texto literario. Por eso hay que apuntar siempre a un conflicto. Solo hay evolución o crecimiento vitales a través de la superación de un bloqueo.